¡Mantén tu casa fresca con estos colores!

La luz y los colores tienen efectos sobre los espacios y es por esta razón que decorar con los colores adecuados, acompañando con buena iluminación, genera un ambiente luminoso y de apariencia fresca. Obtener un ambiente fresco es muy apropiado para los lugares con climas cálidos, y mucho más si la misma es de reducidas proporciones.

Una recomendación que si o si debes aplicar son los colores fríos, como por ejemplo la gama de verdes, azules y violetas son las tonalidades que crean sensación de frescura, y que deberías incluir en paredes o el resto de la decoración, ya que vienen acompañados por tonalidades neutras suaves, justamente la combinación de colores es un requisito fundamental para que un ambiente sea agradable y fresco.

Un dato interesante es que las tonalidades frías no solamente son buenas para generar un ambiente fresco, sino que también tienen la capacidad de ampliar visualmente las dimensiones de un espacio. A la hora de pintar la casa, no tengas miedo de utilizar colores fríos si las estancias reciben mucha luz solar. Los colores fríos refrescan los ambientes y te aportarán calma si los eliges en su versión más clara y mucho carácter si son más oscuros.

Según la investigación, un techo blanco que refleja el 80% de la luz solar se mantiene aproximadamente 31 °C más fresco en una tarde de verano. Generalmente, los materiales blancos reflejan más la luz que los oscuros, y esto también es cierto para los edificios y la infraestructura. El exterior y el techo de un edificio absorben el calor del sol, pero si están hechos de materiales y acabados en colores más claros o blancos, esto puede minimizar esta absorción solar.

El coral, una especie de rojo matizado con algo de rosa, transmite alegría y vitalidad sin resultar tan agresivo como el rojo puro y es perfecto para combinar con otros tonos complementarios, como los turquesas o verde menta, o con tonos neutros como grises y arenas que hacen de tus espacios frescos y únicos al momento de aplicarlo.

El color del mar caribeño o de las islas paradisíacas no podía faltar en la recomendación de colores veraniegos. El turquesa, un azul vivo que se acerca casi a la gama de colores cálidos, queda especialmente bien en tonalidad monocromo combinado con el blanco, pero también con fucsias o corales.

Dentro de los tonos pastel, muy adecuados para decorar casas de verano, el verde menta y el rosa palo son probablemente los colores que más feeling producen entre ellos. Variantes «light» del coral y del turquesa, este tipo de estancias transmiten frescura y alegría, pero a la vez tranquilidad y sosiego.

Otra de las recomendaciones para mantener tu casa fresca, si no lo has hecho ya, es cambiar tus cortinas por estores. Los estores son mucho más ligeros y ayudan a aclimatar el interior, si aún no los tienes puedes aprovechar para comprar uno que vaya con la estética de tus espacios.

Además, si escoges estores en tonos blancos o beige, el color producirá un efecto reflectivo hacia el exterior en los rayos del sol. Por otro lado, los estores son la opción más versátil en decoración de ventanas, por lo que podrás regular a tu gusto la entrada de luz.

Algo también que no debe de faltar en tus espacios es el uso de plantas de interior debido a que muchas de ellas ayudan a absorber el calor y a refrescar cada una de las habitaciones.

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